jueves, marzo 23, 2006

La Sonrisa de Monalisa


Hay películas que es evidente que nos traspasa y nos conmueven, una de esas es La Sonrisa de Monalisa, película ambientada en el año 1953 (post guerra), donde una profesora de arte llega a una universidad de señoritas, que usan la universidad como mero pretexto, pues en definitiva las preparaban para cumplir con sus roles de esposas y madres. Esta profesora que era algo diferente, termino rindiéndose frente a la negativa de aquellas alumnas que como máxima meta de la vida era contraer matrimonio a cualquier precio y sin importar sus sueños de féminas y donde la libertad y el poder de decisión frente a sus metas personales no tenían mayor importancia.
Por cierto y finalmente esta profesora de arte logro gatillar en la mente de algunas que el ser mujer es algo más allá que llevar puesta la careta de buena madre y esposa y que no todo en la vida es cocinar, planchar, educar y estar allí para cuando su hombre la necesite.
Durante mis años de estudiante mi madre me envio a colegios muy religiosos y de mujeres, donde yo era siempre la bicho raro, en artes manuales hacia un esfuerzo sobrehumano porque en vez de aprender a tejer prefería mil veces leer o en vez de aprender a hacer pastelitos me arrancaba a trepar por las rejas o a esconderme en el bosque a tirarles palos a las ranas................ no se cuantas veces me iba a la biblioteca y arrancaba de las enciclopedias mapas del mundo y marcaba con lápices de colores aquellos lugares donde soñaba viajar, muchas veces llamaron a mi madre y la típica “que vean a esta niñita, es demasiada ermitaña, necesita de ayuda sicológica”
Cuan Monalisa, me reía fria y cínica ante los juicios emitidos por esas monjas que educaban para ser futuras buenas madres y esposas, pero a mi no me interesaba....... quería ir más allá.
Aun me cuesta comprender a aquellas que no son capaces de ir más allá de descubrir el entorno y de vivir en libertad, quizá mi madre es un icono referente importante, pues en sus discursos siempre me decía, “haz que tu sueños se cumplan, haz lo que realmente quieres hacer y lo que quieres ser sin importar la opinión o el juicio de los otros”. Ser Feliz, sintonizar con el alma y que mi vida y alma recorran en paz, tranquila y en armonía.
Así como en la película, está profesora hace ver que las mujeres son más allá que seres que “sirven” que postergan sus sueños íntimos en satisfacer aquella presión social que a algunas tanto daños les hace.
Conversaba con un amigo acerca de lo que realmente queremos ser, a lo que realmente aspiramos a vivir y disfrutar de la libertad, de sentarse respirar hondo y volar en nuestro mar de sueños, elevar nuestras alas y cuan pájaros descasar sólo cuando sea necesario, aterrizar sólo para contemplar lo que se ha conseguido en el camino.....................
Hoy sigo siendo un bicho raro y algunos me preguntan de manera frecuente y hasta dudosa, porque mi opción de vida no concuerda con aquellos estereotipos fijados por la sociedad, muchas veces no gasto tiempo en explicar y miro más allá de los ojos del otro y elevo una pequeña sonrisa.
Sólo me basta con ser una mujer libre y feliz que desea obtener sus metas y soñar alto.......... muy alto............